No hace mucho explicamos cómo maquillar ojos marrones, y es que el maquillaje y el mundo de la belleza en general nos apasiona. Ahora queremos enseñaros unas técnicas muy prácticas para que sepáis cómo maquillar ojos pequeños. Libreta en mano y a tomar notas, ¡es súper sencillo!
Cómo maquillar ojos pequeños
Ya seamos profesionales del maquillaje, queramos serlo, tengamos una amiga con ojos pequeños a quien queremos poner súper guapa o sea nuestro caso particular el de tener los ojos pequeños, lo que buscaremos a la hora de maquillar ojos pequeños será agrandarlos.
Esto es así porque los ojos son una parte fundamental del rostro, ya que muestran la expresión, son una comunicación directa con nuestra personalidad y nuestras emociones, y en cuestiones de maquillaje, los ojos representan el punto central. Una mirada bien iluminada y enmarcada serán las claves para dar con un maquillaje de primera.
Sabemos que para enmarcar la mirada lo que deberemos hacer será tratar bien las cejas, depilándolas cuando toca, peinándolas e incluso definiéndolas con el lápiz y un pincel para difuminar, de modo que queden perfectas para crear una mayor armonía en el rostro.
En cuanto a la iluminación, los iluminadores y las sombras de ojos claras harán su parte para que nuestra cara se vea descansada, fresca y joven, que es lo que solemos buscar cuando nos maquillamos.
Por todo ello nos importa tanto trabajar bien los ojos, ya que son partes fundamentales para que nuestra cara se vea más atractiva, así que buscaremos agrandarlos en la medida de lo posible. Unos ojos grandes atraerán más miradas, serán más seductores e hipnóticos. Sin embargo, no es cuestión ni de volverse loca haciendo un maquillaje al estilo de Dior para diario, ni de sentirse menos por que tus ojos sean pequeños.
Entonces, ¿qué debemos tener en cuenta cuando maquillemos ojos pequeños? Fundamentalmente, los puntos de luz. Tened presente que además de agrandarlos, a menudo querremos separarlos, de modo que nos ayude con nuestra misión de que parezcan mucho más.
Lo que deberemos recordar siempre es que la luz debe ir en la zona del lagrimal, y la oscuridad, centrarla en el punto exterior del ojo, en el lado opuesto, en «el rabillo». Sabiendo esto, intentaremos evitar oscurecer el lagrimal, añadiendo siempre sombras de ojos claras en esta zona, así como iluminadores, según el caso.
También deberemos tener en cuenta que el lápiz de ojos negro tiene tanto la capacidad de agrandar como de empequeñecer los ojos, por lo que habrá que tener cuidado. Hay que usar bien esta herramienta, así que os voy a explicar cómo va.
Lo fundamental que no debemos olvidar es que el lápiz negro agranda siempre que quede por fuera de las líneas del ojo, en la zona de las pestañas. Encerrará la mirada si lo maquillamos por dentro. También tendrán mucho que ver las sombras de ojos, ya que las oscuras, en el caso de ojos pequeños, deberemos dejarlas solo para la mitad externa del párpado móvil, intentando compensar la oscuridad con sombras más claras o de color conforme nos acerquemos al lagrimal.